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La Organización de la Gente de la Tierra tiene como objetivo gestionar la formación del Gobierno Planetario Temporal virtual (TPG). A través del Gobierno Planetario, nuestros esfuerzos están dirigidos a sensibilizar a la población para que comprendan la necesidad de adoptar un sistema que beneficie plenamente a la sociedad de este planeta. No pretendemos encontrar soluciones a todo, pero tenemos indicaciones válidas para considerar al Gobierno Planetario como la mejor solución para el bien de la humanidad. Cuando la responsabilidad de guiar el planeta sea entregada al Gobierno Planetario, los sabios a quienes este gobierno será encomendado deberán encontrar las soluciones adecuadas para llevar a la Humanidad a la edad de oro, para que pueda alcanzar la felicidad, el amor, el respeto y la libertad.
El Gobierno Planetario virtual, a través de Internet, no tiene fronteras ni límites. La información debe ser gratuita y universal sin censura. Cientos de millones de personas de todos los países pueden votar y hacer oír su voz. Este proyecto es parte de nuestro programa. El libre acceso a la información es fundamental para la democracia.
El Gobierno Planetario Temporal se compromete a promover la libertad en Internet; es nuestra esperanza de libertad y unidad entre los seres humanos. Debemos trabajar juntos, ampliar la definición de comunidad global, desarrollar la tecnología de las telecomunicaciones, garantizar el libre acceso para todos. Estamos abiertos a nuevas ideas que tiendan a mejorar la red.
La Internet es útil para la economía, la investigación médica, la política y las elecciones. Principios como la libertad de prensa no son sólo nuestros, son valores universales.
Esperamos que los gobiernos de todos los países del mundo nos sigan y se sumen a nuestro compromiso común de defender la Internet y la libertad. La Internet es nuestra religión porque une a la gente de la Tierra.
Es un gobierno administrado por los sabios, elegido democráticamente virtualmente por la Gente de la Tierra. El Gobierno Planetario tiene como objetivo guiar a la humanidad hacia la prosperidad y la felicidad. La razón debe tomar el poder para evitar los peligros resultantes de nuestros propios impulsos agresivos. Gobernar es prever y sólo los sabios pueden prever porque ven más lejos que los demás.
Los valores de los cuales el Consejo de Supervisión, el Gobierno Planetario y el Colegio de Sabios son garantes, representan una regla de progreso para la humanidad; son: empoderamiento y respeto absoluto por la vida; valores de respeto: autorrespeto, amor propio y respeto por los demás; valores de fraternidad: no violencia, paz mundial, reparto de recursos, democracia.
La referencia a la Declaración Universal de Derechos Humanos es sumamente importante, es la primera etapa en la rehabilitación del hombre de la malevolencia del prójimo.
El valor fundamental es la “realización del ser humano” tanto a nivel individual como social. Actualmente, el ser humano se encuentra inmerso en un sufrimiento permanente provocado por las aberrantes y obsoletas reglas de la sociedad. El Gobierno Planetario nos invita a pensar en modelos de sociedad que pongan el sistema y la tecnología al servicio del hombre para que éste se dedique a aquello para lo que fue concebido: pensar, crear, florecer, amar, buscar el placer con absoluto respeto por los demás.
El Paraísmo es un sistema político similar al comunismo, pero sin proletariado. En un sistema Paraísta, los robots y los nanobots toman el lugar del proletariado o la fuerza laboral. El Paraísmo se basa en nuevas tecnologías como la robótica, la ingeniería genética y la nanotecnología. Es la base de que el proletariado y todas las formas de trabajo humano son reemplazados por robots, nanobots y computadoras. La nacionalización, dentro de un sistema Paraísta, conducirá naturalmente a un Gobierno Planetario en el que la globalización (es decir, la nacionalización a escala planetaria) de todos los recursos del planeta será una cuestión de mera justicia e igualdad para toda la Humanidad.
La orientación política de la humanidad no es el comunismo proletario, sino una especie de “comunismo” que se preocupa por el futuro de la humanidad: lo llamamos Humanitarismo. Toda la propiedad debe estar alquilada por cuarenta y nueve años. Esto suprime la injusticia de la herencia. Nuestra herencia, la herencia de nuestros hijos, es el mundo entero, si sabemos organizarnos para hacerlo agradable.
El poder político está formado por hombres dispuestos a hacer cualquier cosa para preservar las ventajas de su situación, aunque eso signifique “cambiar de bando” varias veces durante su carrera política. Basta escuchar sus discursos; para preservar o conquistar un puesto, suelen decir lo que creen que la población quiere escuchar. Así es como, en todo el mundo, Hitler, Stalin y otros criminales han sido elegidos democráticamente por personas mantenidas en el miedo y la culpa. Afortunadamente, la gente es cada vez más consciente de esta situación, y no es de extrañar que la tasa de abstención en las elecciones esté aumentando en todos los países. Esto significa que cada vez más personas ya no confían en los políticos; esto ya ha sido confirmado por encuestas recientes. Gracias a la retransmisión de sus discursos pasados, sabemos que todos son unos mentirosos. Y si justifican su cambio de opinión con un cambio de “coyuntura”, esto prueba que, si no son totalmente mentirosos, son totalmente incompetentes, ¡porque gobernar es prever y nunca han previsto nada! Al contrario, han producido sufrimiento, miseria, hambre, crisis financiera, guerras. El pueblo será el juez, y esto, precisamente, gracias a la democracia y gracias a los miedos que desaparecerán, permitiendo encontrar otros métodos de gobierno más adecuados a nuestra era de ciencia y conciencia planetaria. Como los periódicos pertenecen a los capitalistas, a los poderes políticos, económicos y religiosos, cuanto más se teme, más poder tienen, porque el poder da la impresión de proteger. La ética es una falsa justificación. ¿Cómo conservan el poder? Por miedo: miedo al vecino, al color de la piel, a la cultura diferente, al enemigo, al terrorista, etc.
Gobernar es prever, y todos los grandes problemas que enfrenta la humanidad demuestran que los gobiernos no los han podido prever y por tanto no han podido gobernar. No es un problema de personas sino un problema del sistema de elección de los responsables. Es el sistema el que no es bueno. Las personas sufren las consecuencias de sus errores, no es de extrañar que sólo inspiren mayor desconfianza en lugar de confianza. Guerras, genocidios, sufrimientos, crisis económicas son el resultado de políticas manejadas por expertos que inevitablemente han demostrado con hechos que no lo son. Los sabios, más que nadie, deberían componer el Gobierno Planetario. El nacionalismo exasperante no ha podido prever los problemas relacionados con la crisis financiera mundial, los conflictos del planeta, los dramas del hambre mundial, etc. Esto prueba que sólo un Gobierno Planetario puede enfrentar estos problemas recurrentes. Cuanto antes formemos este Gobierno Planetario, antes saldremos de esta situación.
Es una orientación política de la humanidad que busca, por ejemplo, abolir el concepto de propiedad y eliminar la injusticia de la herencia. Todos los hombres son iguales al nacer, lo que logran, sólo se lo deben a ellos mismos; a cada uno su propio mérito. Si todos los hombres tienen derecho a ganarse la vida dignamente, los que hacen más que los demás por sus semejantes tienen derecho a tener más que los que no hacen nada por la comunidad.
Un gobierno planetario aplicaría el humanitarismo; la institución de una moneda global pendiente de la supresión del dinero y, en consecuencia, del trabajo manual; la institución de un idioma mundial; la abolición del servicio militar y la puesta de los soldados de carrera al servicio de la paz; la prohibición de armas.
El primer paso es formar un Gobierno Planetario Temporal elegido democráticamente mediante el uso de Internet. Podrán ser elegidos todos aquellos que lo deseen y compartan los valores en cuyo nombre se formó. Una vez establecido, el Gobierno Planetario emitirá directivas y sugerencias a los gobiernos y a todas las principales organizaciones mundiales.
Científicos, artistas, investigadores, filósofos, sin embargo, todos aquellos que son conscientes de sus acciones y desean que la consecuencia de su acción sea positiva para el contexto civil. Sólo quieren actuar en interés de la humanidad. El que piensa en los intereses de la comunidad sin pensar en los propios, a la vez demuestra que es sabio como persona que sabe escuchar, que sabe aprender de los errores del pasado cometidos por aquellos políticos que han puesto este planeta de rodillas. El sabio es humilde, el que nunca sabe lo suficiente, que no se enreda en emociones negativas, que tiene sentido de la justicia, de la lealtad pero, sobre todo, el que tiene imaginación, que sabe prever el futuro y que ama a los suyos, con ganas de trabajar por su felicidad.
La inteligencia no es erudición. No está vinculado a la cantidad de conocimientos acumulados a través de los estudios. Se puede educar sin ser inteligente. Es una cuestión de sentido común, también llamado sentido común conciudadano. Nuestra acción tiene como objetivo preparar a la humanidad para comprender la utilidad de un sistema que puede traer felicidad a este planeta confiando el liderazgo a los sabios.
Artistas de todo tipo, científicos (ellos también son creativos, como inventores, investigadores), todos aquellos cuyo espíritu creativo, fruto de su imaginación, puede aportar un soplo de creatividad y belleza a este planeta.
El Gobierno Planetario no es un partido político ni una dictadura, sino un sistema de gobierno que utiliza la opinión de muchos sabios de todas las naciones de la Tierra, creando un “colegio global”. La colegialidad impide que las decisiones las tome una sola persona, como es el caso hoy en día en los regímenes presidenciales. Está compuesto por hombres y mujeres de todas las naciones del planeta. Cada representante nacional tiene un coeficiente de voto proporcional al número de habitantes que pueblan la nación que representa.
Creando un Gobierno Planetario que haga de la Tierra un mundo de felicidad y florecimiento. Eliminar la violencia. Reemplazar el derecho al trabajo por el derecho a florecer. Salvar a la humanidad del peligro de destrucción por falta de sentido común por parte de los líderes actuales. Todo hombre tiene derecho a vivir cómodamente desde su nacimiento hasta su muerte, sin compensación. Este es el primero de los derechos humanos que un Gobierno Planetario pretende aplicar, para liberar al hombre de la esclavitud del trabajo forzoso, favoreciendo el florecimiento de estos que pueden dedicar su tiempo a lo que más les gusta, incluso al trabajo, pero voluntariamente por libre elección. Esto ocurrirá cuando la evolución de los cambios salariales sea inexistente paralelamente a la reducción del tiempo de trabajo, lo que provocará la consiguiente supresión del dinero por su inutilidad.
El Gobierno Planetario nunca podrá convertirse en un régimen, porque hará uso de un Consejo de Sabios y Personas Creativas que presentará sugerencias, ideas y consejos al Gobierno Planetario. La colegialidad impide que una sola persona tome decisiones, como ocurre en las repúblicas presidenciales.
El Gobierno Planetario no es un partido político ni una dictadura, sino un sistema de gobierno que utiliza la opinión de muchos individuos sabios y creativos de todas las naciones de la Tierra, creando un “colegio global”. Las personas creativas son artistas de todo tipo, científicos, inventores, investigadores; todos aquellos cuyo espíritu, fruto de su imaginación, puede traer un soplo de creatividad y belleza a este planeta.
La colegialidad impide que las decisiones las tome una sola persona, como ocurre actualmente en los regímenes presidenciales. El Gobierno Planetario Temporal utilizará los consejos de muchas personas sabias y creativas; este organismo se llamará Consejo Mundial de Sabios y Creativos (WCWCP). El WCWCP será elegido democráticamente por la Gente de la Tierra. Está compuesto por hombres y mujeres de naciones de todo el planeta. Cada representante nacional tiene un coeficiente de voto proporcional al número de habitantes que pueblan la nación que representa. Podrán presentar al Gobierno Planetario las mejores propuestas para mejorar las condiciones humanas, la seguridad del planeta y hacerlo más bello. El Consejo de Gente Sabia y Creativa se formará a través de elecciones democráticas del sitio de la EPO (Organización de la Gente de la Tierra) en las fechas establecidas por el Gobierno Planetario Temporal. El Consejo Mundial de Sabios será reelegido cada tres años.
Todos los días, todos nos beneficiamos de los frutos de la imaginación, los pensamientos y el trabajo de genios y científicos. A lo largo de nuestro día, usamos objetos que existen sólo gracias al cerebro de individuos de inteligencia superior al promedio. De la bombilla eléctrica al televisor, de la bicicleta al coche, del grifo de agua fría a la lavadora, de la máquina de escribir a la grabadora, del piano al sistema de sonido, todos estos objetos que hacen nuestras vidas. más fáciles o más agradables se deben a personas que han sabido utilizar su imaginación para encontrar nuevas soluciones a determinados problemas. Incluso una persona con retraso mental utiliza varios de estos objetos sin poder comprender cómo se fabricaron. Sin embargo, ve que su vida mejora con su uso. Y esto es bastante normal. Por el momento, estos genios y científicos no son libres de hacer lo que quieran en el marco de las organizaciones gubernamentales de investigación. En consecuencia, tienen que trabajar en programas que se les imponen, motivados casi exclusivamente por intereses políticos militares, para que su trabajo sea rápidamente rentable. Esto conduce a la siguiente paradoja: los genios deben trabajar bajo las directivas de los mediocres. Los políticos hacen promesas para obtener ventajas para sí mismos, mientras que los genios trabajan para mejorar las condiciones de todos los seres humanos. ¿Quién merece gobernar? ¿No sería deseable tener el mundo gobernado por las personas más inteligentes?
Intentaremos ayudar al proceso de cambio apoyando la ciencia, porque la ciencia es el secreto para una mejor vida en la Tierra, para un mejor entendimiento entre las razas y entre las personas del planeta, de modo que los avances ayuden a asegurar que las personas ya no sufrirán. Hay gente hambrienta mientras se gastan miles de millones de dólares en armamento.
El capitalismo es la mejor forma de eliminar el dinero algún día. El capitalismo y la globalización son muy importantes; son la mejor forma de eliminar el dinero. Hemos visto lo que produce el comunismo, sabemos lo anti-progreso que es y cómo destruye cualquier posibilidad de desarrollo en la Tierra, podemos ver en qué condiciones vivían los países comunistas. El capitalismo permite a las personas que más aportan a la sociedad desarrollarla, ayudarla a progresar y hacer descubrimientos. El dinero es el mayor enemigo del dinero, por eso debemos ganar tanto como sea posible; debemos hacer que esta sociedad produzca tanto dinero como sea posible. Cuanto más haya, más implosionará algún día, gracias a la nanotecnología, gracias a todas las tecnologías que vendrán. Caerá por sí mismo y llegaremos a una sociedad sin dinero. Aún queda mucho camino por recorrer, así que, por el momento, conformémonos con lo que ocurrirá pronto: la eliminación del trabajo, que estará vinculada a una eliminación progresiva del dinero. ¿Por qué trabajamos? Para ganar dinero, y si ya no necesitamos trabajar, será necesario que todos los seres humanos tengan lo suficiente para vivir, para refugiarse, para vestirse, en una sociedad maravillosa. Y quien haga algo más, una creación científica o artística, lo hará por amor. El pintor pintará una obra de arte ya no para que la compre un multimillonario, sino para ofrecérsela a alguien que realmente la aprecie; el científico hará un descubrimiento no para ganar dinero, sino porque le parece un medio de mejorar aún más la condición de los demás, por placer, por el placer de la investigación. Este es el mundo hacia el que nos dirigimos y por eso queremos vivir mucho tiempo, verlo todo. Pero para lograr esto, se debe formar un Gobierno Planetario.
Decimos SÍ a la globalización, en el sentido de abrir fronteras. Debemos decir SÍ a la globalización del AMOR y NO a la globalización del poder. No a la globalización política nacionalista que lleva al pensamiento único.
Las soluciones propuestas a los grandes problemas que asaltan a la humanidad son las siguientes: la formación de un Gobierno Planetario, que aplicaría el Humanitarismo; la institución de una moneda mundial pendiente de la eliminación del dinero; la fabricación de robots biológicos para eliminar el trabajo manual; la institución de un idioma mundial; la abolición del servicio militar y la puesta de los soldados de carrera al servicio de la paz; la eliminación de todos los armamentos.
Hacemos proselitismo por la ciencia porque la ciencia es nuestra religión, una religión en el sentido de “religere”, que une a todos los seres humanos. La ciencia es un vehículo para la paz, la armonía y la buena salud. Ciencia significa: la búsqueda de la verdad. La ciencia es lo que la humanidad inteligente, y por tanto sabia, puede responder. Son las respuestas futuras a las preguntas de hoy, es la evolución del propio conocimiento, es el motor de la vida, porque la hace progresar; es la religión de los seres evolucionados. La ciencia es a menudo objeto de críticas y oposición, Albert Einstein hizo una declaración que golpea con fuerza en el asunto: "Los grandes espíritus siempre se han enfrentado a la oposición violenta de las mentes mediocres". Sólo la ciencia podrá darnos todo lo que necesitamos para vivir bien y ser felices, y será gracias a la ciencia que haremos de nuestro planeta un paraíso donde vivir para siempre.
El ejército es el enemigo número uno de la humanidad; el ejército es una escuela de violencia y odio. Es el más destructivo de los cultos que realmente practican el lavado de cerebro, es responsable de miles de muertes en todo el mundo, a lo largo de la historia humana; es el mayor consumidor de presupuestos nacionales, de fortunas que permitirían la educación de las masas y la popularización de la ciencia. El servicio militar es una de las verdaderas guaridas del lavado de cerebro, practicando reconocidas violencias morales y psíquicas, transformando a jóvenes responsables en potenciales asesinos, preparados para cualquier delito en cuanto se les dé la orden. Alivia la responsabilidad, modela en el sentido deseado y controla la personalidad así obtenida para preparar a los jóvenes autómatas listos para matar.
Si los genios que hacen las armas evolucionan con sus inventos, en lugar de dejarse reclutar por los poderes político-militares, aliados por la paz, podrían inventar medios que permitan neutralizar las armas actualmente existentes. Algunos científicos son víctimas de organizaciones políticas y militares que se apoderan de su trabajo para utilizarlo a su manera; sus inventos se convierten en armas mortales. La ONU con sus Cascos Azules no puede hacer nada porque se trata sólo de un ejército de disuasión política, cuyas fuerzas son insignificantes en comparación con las de las grandes potencias. Debe abolirse urgentemente el servicio militar en todos los países del mundo. Todos los soldados de carrera deben transformarse en guardianes de la paz mundial, es decir, ponerse al servicio de la libertad y los derechos humanos.
Es la supresión del sentido de responsabilidad del individuo por sumisión a aquellas autoridades que condicionan al individuo imponiendo su voluntad con la persuasión del “sentido del deber”: el que cumple las órdenes es más responsable que el que las da... Siempre que sucede algo bueno o malo y se explica por el poder de Dios, Alá, Buda o Krishna, ¡o si se invoca el destino, el karma, los antepasados, los espíritus benéficos o malignos, las estrellas, un cristal de cuarzo o un gato negro, el individuo se niega su responsabilidad! Es importante comprender que el éxito depende de asumir la plena responsabilidad de su vida. Cuanto más abandones estos accesorios, más control tienes de tu vida y más puedes dirigirla hacia donde quieras.
La ONU tenía la misión de prevenir guerras y encontrar soluciones diplomáticas a los conflictos entre naciones. La ONU no ha cumplido esta misión. Por lo tanto, ya no hay razón para que países que están a favor de la paz mundial sean parte de esta organización que es sólo un títere de Estados Unidos utilizado para imponer el estado de orden estadounidense. El 73% de los europeos piensa que Estados Unidos es el país más peligroso. En realidad, es la ONU la que es criminal porque es responsable de la muerte de miles de seres humanos que no quiso y no pudo defender. La ONU fue creada para la paz, para detener las guerras en la Tierra, para distribuir un poco más de amor y comprensión en el mundo. Si es incapaz de prevenir las guerras, la ONU traiciona la razón fundamental de su creación. La ONU, que debería representar a todos los pueblos del mundo, también debería dejar de utilizar el calendario cristiano en sus documentos oficiales, petición que ha quedado sin respuesta (Proyecto ICACCI). ¿Cómo pueden los pueblos no cristianos, que son la mayoría en este planeta, aceptar que los documentos oficiales de la ONU sean firmados por sus representantes con una fecha cristiana? Esto es un insulto a los musulmanes, budistas y otros pueblos no cristianos, y una prueba más del imperialismo estadounidense y cristiano en su forma de dominar la ONU para dominar mejor al mundo. Ha llegado el momento de que los pueblos del mundo comprendan que Estados Unidos, que representa solo el 5% de la población mundial, está aterrorizando al mundo y quiere organizarlo a su manera. Ha llegado el momento de desmantelar la ONU y reemplazarla por una organización verdaderamente neutral en la que todos los países tengan la misma voz; un esbozo de un verdadero gobierno mundial a través de algo que podría llamarse Organización de la Gente de la Tierra (EPO).
Lo hace ahora porque los hombres todavía están mezclados con máquinas de trabajo forzoso. Las máquinas y los hombres no deben mezclarse: los hombres se hacen florecer y las máquinas funcionan bajo el control de robots que liberan al hombre de la condición de esclavitud a la manufactura (es decir, el lugar donde se realiza el trabajo forzoso, del cual el beneficiario es el propietario). La tecnología automatizada beneficia a toda la comunidad.
El trabajo no debe considerarse algo sagrado. Todo ser tiene derecho a ganarse la vida, aunque no trabaje. Todos deben intentar florecer en el campo que les atraiga. Los sistemas automatizados y los robots biológicos liberarán al hombre de la obligación de trabajar. Cuando el trabajo ya no exista, el hombre podrá florecer libremente. Todo ser que trabaja a cambio de ganarse la vida practica la prostitución, alquilando su cuerpo y su mente por dinero, al igual que las prostitutas. “Ya no necesitaríamos esclavos si las herramientas pudieran moverse por sí mismas” (Aristóteles) = lo que hace el hombre, la máquina puede hacerlo mejor. El hombre puede liberarse de la esclavitud del trabajo si sólo se adoptan unidades de producción robóticas autosuficientes y autocontroladas.
Es un sistema económico basado en el principio de que es necesario que las unidades de producción produzcan lo que la gente necesita y lo distribuyan sin retribución. Las necesidades vitales son: alimentación, vestido, vivienda.
Al contrario de lo que muchos piensan, creyendo que para volver a la naturaleza hay que rechazar la ciencia, es la ciencia la que nos hará volver a la naturaleza. Cuando se automatiza el trabajo y se suprime el dinero, el hombre podrá florecer y vivir en total armonía con la naturaleza. El hombre debe respetar la naturaleza hasta que sea capaz de recrearla, hasta que sea capaz de convertirse él mismo en un creador.
Metas a medio plazo: moneda mundial única; idioma único; economía de distribución; desarrollo de la automatización y la investigación científica; eliminación del servicio militar.
Objetivos a largo plazo: destrucción de todas las existencias de armas en la Tierra por parte del Gobierno Planetario; eliminación de fronteras y definición democrática de fronteras.
La nanotecnología permite obtener cualquier material a partir de cualquier materia recombinando la composición atómica de la materia. Cualquier cosa puede transformarse en casi cualquier otra cosa, en cualquier lugar, sin transporte y sin extracción, en una metamorfosis que va más allá de los sueños más locos de los antiguos alquimistas. Soñaban con fabricar la piedra filosofal que convertiría el plomo en oro. Eso es exactamente lo que puede hacer la nanotecnología; o carbón en diamantes; o hierba en una pierna de pollo o en un bistec o en un vino con un aroma digno de los viñedos más prestigiosos. La nanotecnología permitirá eliminar casi por completo la contaminación generada por las actividades humanas (no más agricultura, no más fábricas, no más minería, no más ganadería). Eliminación de escuelas, hospitales y cárceles; eliminación de lugares de trabajo. La Tierra podrá volver a ser un espacio salvaje y natural, y los seres humanos podrán redescubrir una naturaleza que sólo les servirá para su placer y asombro; y ya no será necesario explotarlo. Con la nanotecnología, los seres humanos de la sociedad ya no tendrán que hacer ningún esfuerzo. Viviremos en una sociedad del ocio sin más esclavitud del trabajo y las ganancias.
El hombre no nació para trabajar, tuvo que adaptarse a esto para poder sobrevivir, pero en poco tiempo el hombre logrará sus verdaderas metas que son: pensar, crear, florecer.
Los medios de comunicación tienen una tendencia a influir en la mayoría al estar condicionados por información falsa o por información comentada según la opinión de quienes la difunden. Esta es la normalización de la opinión pública. A pesar de que la ciencia está mejorando la calidad de vida a pasos agigantados, la gente sigue sintiéndose insegura y la causa de tal comportamiento puede atribuirse a los medios de comunicación. En el mundo contemporáneo, los medios de comunicación han aumentado la sensación de incertidumbre en nosotros. Los periodistas son víctimas del sistema. Es importante tener el coraje de dar la información más justa y correcta posible, pero los intereses partidistas se anteponen a la verdad. La transmisión de información y conocimiento es fundamental en la construcción de una conciencia planetaria y supranacional; los medios de comunicación tienen un papel fantástico que desempeñar. Pero este papel de informador real, de "concientizador" de la humanidad, de divulgador científico, de vehículo de difusión de información destruyendo miedos y supersticiones que deben unir a una prensa real, se ve oscurecido por la lamentable realidad de una prensa perteneciente a poderosos grupos financieros cuyo único objetivo es ganar dinero. Un mayor número de lectores e índices de audiencia genera más ingresos publicitarios y tiene prioridad sobre la calidad de la información que se transmite. Peor: si información negativa o incluso totalmente falsa puede incrementar el éxito financiero de los medios, no lo dudarán ni un segundo y optarán por difundir mentiras porque lo que más vende es siempre el miedo. Entonces estos poderes que precisamente tratan de mantener su dominio sobre el miedo del público son los aliados directos de la prensa. El poder político, las religiones tradicionales y el ejército, cada una de estas organizaciones cuenta con un poderoso servicio de relaciones con la prensa que sabe que tiene todo el interés de que los medios de comunicación transmitan información que mantenga el miedo entre la población; y esto llega hasta la mentira deliberada, que se llama desinformación. Pero al mismo tiempo surgen medios verdaderamente “concientizantes” o científicamente propagandistas que conquistan partes cada vez mayores del mercado, afortunadamente debilitando a los medios tradicionales. Revistas o cadenas de televisión temáticas, como CNN, que no difunden más que información las 24 horas del día, o canales como el “Discovery Channel” en EE.UU., que no difunden más que programas de propaganda científica de forma permanente, tienen un éxito increíble y participan en el necesario debilitamiento de los medios que generan miedos y mentiras. El creciente número de periódicos, revistas o cadenas de televisión en quiebra es alentador y esperanzador. Significa que la población es cada vez menos estúpida y deja de aceptar o ver balbucear los medios.
Se trata de dar más espacio a la información sobre el progreso científico a través de los medios de comunicación, con el fin de acelerar la evolución de la humanidad y así la eliminación progresiva, gracias a una conciencia global, de esas tradiciones oscurantistas y culpables que aún se encuentran en la actualidad en primer plano.
La propaganda científica es casi inexistente y los poderes existentes prefieren mantener a la población en la ignorancia; ignorancia que hace que sea mucho más fácil mantener los miedos en los que los poderes confían con razón para preservar su dominio. Miedo al extranjero, miedo al comunismo o al capitalismo que ha hecho posible que se acumulen las megatoneladas de armas termonucleares, miedo a otras razas, miedo a otras religiones, miedo al sida, miedo a un dios o al diablo, miedo a cultos de lavado de cerebro, el miedo a la ingeniería genética, el miedo al progreso, el miedo a la contaminación, el miedo a los genios, etc. Todos estos miedos preservados vergonzosamente se basan en la ausencia de conocimiento científico de los problemas subyacentes. Si hubiera una verdadera difusión científica sobre todos estos temas, la gente dejaría de tener miedo y serían mucho menos manipulables y controlables, y esta es la razón por la que los gobiernos refrenan vergonzosamente cualquier verdadera difusión científica. Quieren, en primer lugar, mantener su poder sobre los individuos: por eso mantienen sus miedos. Basta escuchar los discursos políticos para convencerse de ello. Pero si no hubiera nada más que el poder político para desmoralizar a la gente y bajar el nivel de conciencia, las cosas serían menos graves. El problema es que hay tres fuerzas principales interesadas en mantener a las poblaciones en el oscurantismo. Los gobiernos, pero también las grandes organizaciones que defienden las tradiciones, en particular la tradición que justamente consiste en “desconcientizar” y atemorizar a las poblaciones tanto como sea posible, es decir, las religiones tradicionales, el ejército, etc. Estas organizaciones, porque han fundado su poder sobre los miedos y la ausencia de conocimiento, no tienen ganas de que la población comience a comprender y abandone repentinamente sus miedos y su necesidad de protección, contra el “diablo” o los “enemigos”. Desde el momento en que uno comprende que no hay diablo, ni enemigo, ya no necesita protección.
Los obstáculos que encontramos como pioneros de los nuevos paradigmas están relacionados con: ciencia - religiones - sexualidad - educación - artes - orígenes de la vida - relaciones humanas - política. La ciencia está relegada a viejos cálculos, las religiones frenan el desarrollo científico, la sexualidad es fuertemente reprimida y culpada, la educación no abre la posibilidad de nuevos valores a los jóvenes, las artes son mayormente ignoradas, los orígenes de la vida están dominados por obsoletas teorías evolutivas desprovistas de verdaderos fundamentos científicos, las relaciones humanas carecen de principios basados en el respeto absoluto por la vida y la importancia del vínculo fraterno entre los pueblos, y la política, con su poder y sus intereses, ignora todo esto.
El “paraíso terrenal” que es posible a través del despertar es la edad de oro de la civilización donde la ciencia está al servicio del hombre, donde los ciegos pueden ver y los sordos pueden oír científicamente. Es una elección hacia el paraíso que permite el uso pacífico de la ciencia. El infierno es un regreso al estado primitivo, donde el hombre sufre la naturaleza en lugar de dominarla. Esta es de alguna manera una selección natural, a nivel cósmico, de las especies capaces de viajar lejos de su planeta. Sólo aquellos que dominan perfectamente su agresividad pueden llegar a esta etapa. Otros se autodestruyen tan pronto como su nivel científico y tecnológico les permite inventar armas lo suficientemente poderosas para hacerlo.
Los preceptos son las reglas morales, civiles y religiosas. Los antiguos preceptos primitivos “trabajo, campo, familia” serán sustituidos por estos más adecuados a las necesidades del ser humano y de la propia sociedad: “florecimiento, libertad, fraternidad universal”. El trabajo no tiene nada de sagrado cuando lo motiva nada más que la necesidad de ganarse la vida con dolor; también es tremendamente degradante venderse, vender la vida para poder comer realizando un trabajo que las máquinas simples pueden hacer. La familia siempre ha sido un medio adoptado por viejos y nuevos esclavistas para obligar a la gente a trabajar más duro por un ideal familiar quimérico. Finalmente, el país no es más que un medio adicional para crear una competencia entre los hombres, acercándolos cada día con más ardor al sacrosanto trabajo. Por otro lado, estos tres términos, trabajo, familia y país, siempre han sido apoyados por religiones primitivas. ¡Pero ya no somos primitivos ahora! ¡Sacude estos viejos principios polvorientos y aprovecha la vida en esta Tierra que la ciencia puede convertir en un paraíso!
Desarrollando tecnologías y robótica, comenzando a reorganizar las estructuras de la sociedad mundial hacia una economía distributiva, el hombre podrá alcanzar rápidamente su realización material y espiritual. Todo esto pasa necesariamente por una visión global del derecho al placer; el valor fundamental para la realización del ser humano, tanto a nivel individual como social. Actualmente, el ser humano se encuentra inmerso en un sufrimiento permanente provocado por las reglas aberrantes y obsoletas de la sociedad. Debemos empezar a pensar en modelos de sociedad que pongan el sistema y las tecnologías al servicio del hombre para que finalmente pueda dedicarse a aquello para lo que fue concebido: pensar, crear, florecer, amar, buscar el placer en absoluto respeto a los demás.
Los sumos sacerdotes de las religiones oficiales persuaden a las multitudes de que las religiones son tolerables sólo si tienen algunos milenios de antigüedad y que todo lo demás no es más que una masa de cultos peligrosos. Se interponen entre la verdad y el hombre, y lo inducen a creer en la religión tradicional que bautiza a los niños, que defiende a la familia supresora del temperamento y contribuyente, que defiende al país, que apoya a los políticos que están dispuestos a hacer cualquier cosa para seguir cobrando sus salarios, que apoya a los militares, esos funcionarios privados de responsabilidad de sus funciones, que se engañan a sí mismos al pensar que están defendiendo a la sociedad cuando condenan, torturan o matan a alguien. Estas son las religiones que aman a los que gobiernan; no las que puedan estimular a los jóvenes haciéndoles descubrir la verdad, que les puedan dar la voluntad de derrocar las estructuras primitivas, de reemplazarlas por sistemas en relación con las tecnologías futuristas en las que vivimos.
La religión se trata de crear un vínculo; si los seres humanos no aprenden a crear un vínculo consciente entre ellos, como el vínculo consciente que podemos tener entre las células de nuestro cuerpo cuando se pone en armonía a través de la meditación, será difícil encontrar armonía en este planeta. En realidad, la humanidad no es más que un conjunto de células (humanos) unidas y para que estén en armonía es necesario crear lazos de Amor, Bondad y Respeto El amor es la fuerza que mantiene unidas a las personas.
¡Actualmente, las religiones no respetan los derechos humanos! Cada estado debe crear una comisión de control que tenga la tarea de verificar que ninguna religión o movimiento filosófico proponga o imponga a sus miembros, en sus escritos o aplicaciones, elementos contrarios a la Declaración Universal de Derechos Humanos. Si analizamos el comportamiento, los contenidos, las enseñanzas y los principios de algunas religiones tradicionales, notaremos que muchas veces ignoran e incluso van en contra de estos derechos. El Gobierno Planetario deberá tener esto en cuenta.
La Declaración Universal de Derechos Humanos se aprobó el 10 de diciembre de 1948. En nuestra sociedad, los derechos humanos a menudo se ignoran y, en particular, el artículo 18 que dice: “Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, conciencia y religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o creencias, y la libertad, ya sea solo o en comunidad con otros y en público o en privado, de manifestar su religión o creencia en la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia ". El artículo 19 dice: "Toda persona tiene derecho a la libertad de opinión y expresión, incluido el derecho a no ser acosado por su opinión, y a buscar, recibir y difundir información e ideas, a través de cualquier medio e independientemente de las fronteras".
La Carta de Derechos Humanos no se enseña en las escuelas y no se aplica realmente. ¿Cómo se puede hacer cumplir algo si no se enseña? Una civilización que quiera alejarse de los comportamientos primitivos (visión limitada y egocéntrica, fundamentalismo, fanatismo y voluntad de dominar a los demás), debe definir reglas que contribuyan al respeto y dignidad del hombre para protegerse de la malevolencia e intolerancia de sus semejantes: Derechos Humanos. La constitucionalidad del Gobierno Planetario debe tener como principio fundamental la Carta de los Derechos Humanos.
Debe ser más fuerte que las creencias que ha generado, lo suficientemente inteligente y lo suficientemente abierto para comprender. El hombre es perfecto, pero se vuelve imperfecto pensando que no lo es, resignado a ello.
El hombre es un ser ordinario, en un tiempo ordinario, en un punto ordinario del universo infinito.
Esta organización educativa planetaria tendrá poder absoluto sobre la elección de los planes de estudio de las escuelas mundiales, supremacía total sobre la educación nacional, prohibiendo, en particular, la educación religiosa o racial que despierte el fanatismo, e impondrá la enseñanza de la igualdad de todas las religiones (incluido el ateísmo). en todas las escuelas del mundo, con el fin de enseñar a las generaciones futuras a respetar y amar todas las filosofías existentes en nuestro planeta. La enseñanza de los derechos humanos será obviamente obligatoria en todo el mundo. Es a este precio que nunca más aparecerá un dictador entre las generaciones venideras, que nunca más un hombre se sentirá investido con la misión de levantar una parte de la humanidad contra otra en nombre de una raza, un dios o un sistema. Las personas que educan criminales en contra de la humanidad son ellos mismos criminales en contra de la humanidad. No olvidemos nunca que Hitler o Saddam Hussein recibieron una "educación" ... y que sus educadores son responsables de lo que se convirtieron. Lo que ponemos hoy en la mente de nuestros hijos saldrá a la luz algún día. Nunca olvidemos eso.
Para solucionar el problema, se debe acentuar la anticoncepción y promulgar leyes estrictas que autoricen a las mujeres a tener no más de dos hijos. Se debe alentar a los jóvenes a tener menos hijos para que sean más felices y puedan sobrevivir. La sobrepoblación constituye una amenaza económica (demasiadas bocas que alimentar) y una amenaza ecológica (la necesidad de expandirse con la consiguiente desfiguración del medio ambiente).
“Si no se concibieran hijos no deseados en todo el mundo, el problema demográfico se solucionaría en buena parte”, dijo el vicepresidente del Consejo de los Pueblos, aludiendo a la necesidad de fomentar la anticoncepción y el aborto, sin convertirlo en un problema de conciencia a causa de una sociedad demasiado moralista ligada a tradiciones como “crecer y multiplicarse” o “lo que Dios ha unido, el hombre no se atreva a dividir”.
Estimamos que el 90% de la degradación ambiental del mundo se debe a la proliferación de la especie humana. Los propios ecologistas no aluden a esta situación; ¡esta ceguera es asombrosa!
La población mundial es actualmente de alrededor de ocho mil millones de personas.
Estas nuevas bocas necesitan nutrirse proporcionándoles todo el bienestar material al que todo ser humano tiene derecho: vivienda, calefacción, transporte, etc. Fomentar la limitación de la proliferación anarquista de la especie humana es una de las cuestiones de concienciación que deben abordarse. Sin embargo, la experiencia nos muestra que muy pocas personas están dispuestas a aceptar la idea de que la reproducción no es un derecho adquirido e inalienable. Reproducir es diseñar códigos genéticos para el futuro y nadie es dueño del futuro. Abordar el tema con el expediente de la ecología y las consecuencias sobre el medio ambiente con el aumento de la población, en cambio, va muy bien.
Propuesta: fomentar el control de la natalidad y la anticoncepción. La limitación de la prolificidad ocurrirá espontáneamente con el aumento de la educación y el nivel de vida. El empoderamiento de las mujeres es un paso clave en el proceso: la lucha contra las ideologías religiosas oscurantistas que las alienan es un deber. Disuadir financieramente (cuando tocamos la billetera la gente recuerda mejor la lección). Fomentar el cuidado de uno o dos hijos durante los primeros siete años, en la medida de lo posible, con algunas prestaciones gratuitas y educación, salud, vestimenta, custodia, etc. Imponer sanciones económicas, pesadas y proporcionales a los ingresos de los padres que superen el umbral de los dos niños. Promover la adopción incluso para parejas del mismo sexo.
Ellos son: empoderamiento y respeto absoluto por la vida; valores de respeto: autorrespeto, amor propio y respeto por los demás; valores de fraternidad: no violencia, paz mundial, reparto de recursos, democracia. La referencia a la Declaración Universal de Derechos Humanos es sumamente importante, es el primer paso para rehabilitar al hombre de la malevolencia de sus semejantes. El Valor Fundamental es la “realización del ser humano” tanto a nivel individual como social. Actualmente, el ser humano se encuentra inmerso en un sufrimiento permanente provocado por las reglas aberrantes y obsoletas de la sociedad. El conocimiento nos invita a pensar en modelos de sociedad que pongan el sistema y la tecnología al servicio del hombre para que éste se dedique a aquello para lo que fue concebido: pensar, crear, florecer, amar, buscar el placer en absoluto respeto al otro.
No elegimos nacer, pero desde el momento en que llegamos al mundo, vivir sirve al propósito de tener el placer de vivir, ya sea el placer de contribuir a entrar en la edad de oro, el placer de disfrutar poniéndose en armonía con el infinito, o de cualquier otra forma. “¡El único privilegio de estar vivo es ser consciente! Y cuando estás consciente, sólo puedes maravillarte con tu propia conciencia y ser feliz de vivir " (Raël).
La humanidad necesita una vida espiritual donde las personas puedan meditar, rezar, sentirse conectadas al infinito, conectadas con las estrellas, sintiéndose conectadas con todo, como enseña el budismo, que es una religión del futuro en comparación con el catolicismo o el cristianismo, sin ningún miedo a ser humano, de poder comprender y progresar gracias a la ciencia, y al mismo tiempo sentirnos conectados con cada ser humano de todas las razas de la Tierra, sintiendo que la vida de cada persona es muy importante y que debemos protegerla y amar a todos los seres humanos ¡en el planeta! Fomentar completamente la investigación científica, cuando no es violenta y aporta una nueva espiritualidad, es convertir este planeta en un paraíso. Muchas personas carecen de espiritualidad porque ya no pueden creer en esta espiritualidad. Por lo tanto, son desesperados, por lo que beben, toman drogas, se suicidan. Se necesita una nueva espiritualidad. No pretendemos ser la única respuesta a estos problemas. Creemos que somos la mejor respuesta.